lunes, 16 de agosto de 2010

El hombre y la Mujer

Siempre tratamos de encontrar al hombre perfecto. Buscamos al chico de la propaganda. Al que está en la nota de la revista, en la cual dice: “me gusta cocinar, siempre invitar yo en las salidas y hacer sentir a la mujer como se debe”.

Para tu poca-o mucha- información ¡eso no existe!, no le dice una pesimista, lo repite una realista.

Siempre surge aquel que es como es; sin poco pero tampoco con mucho. Que tiene esa alquimia entre lo perfecto y lo imperfecto. Como somos nostras. ¿O a caso te creías la mejor o la peor del mundo?

Toda la corta-y no tanto- vida deteste esta maldita frase “ya encontraras a la horma de tu zapato” ¡para! ¿Qué significa eso? ¿Qué es? Nada

Una vez mire una película Francesa;Muñecas Rusas- en donde Wendy (la protagonista) le decía a Xavier- el actor principal que refleja claramente la mentalidad masculina- que el era el hombre perfecto. Que sabía que las mayorías de las mujeres se arrodillaban ante la belleza, y que a ella no sólo le importaba eso sino también otras cosas más. Y que lógicamente sabía que no era la perfección hecha en persona, pero que de igual manera le gustaba.

A veces nos cuesta demasiado encontrar a ese hombre. Se busca sin parar como quién busca un tesoro.

Llegue acá escapando de un hombre. En realidad esa es no es la palabra, es otra: yo me canse. Y lo peor es que siguen insistiendo.

Parece que mis distancia no sirvió para mucho: ¡me sigue llamando casi todos los días! Y yo le sigo respondiendo: ¡no me llames más! ¿No entiende que no quiero verlo y ni escucharlo?

¿Existe la histeria masculina? Supongo que si.

Yo acá estoy bien. Aunque hay cosas que ya no puedo controlar: ¡no existe la amistad entre el hombre y la mujer! ¿Les nombre a Iván? Iván es lo que no controlo y lo que es peor es que cada vez no lo quiero controlar…eso es para otro momento.

Me suena el teléfono. Seguro es mi hermano Facundo que esta en situación que Tobías predijo hace unos meses atrás: se peleó con la novia después de tres años. Seguro tendré que hacer la inversa de la realidad: yo ser la psicóloga y no él como lo es habitualmente. Pero lo llamativo que no hablaremos de su ex novia sino de Eugenia Licenciada como él compañera de trabajo. Mal escrito por Rebecca.