miércoles, 11 de noviembre de 2009

Todo se esfuma

Todo parecía perfecto. Yo me sentía en una constante levitación. Era la primera vez que amaba realmente. Podía destruirse el mundo pero no me importaba: estaba él y yo ¿podía pedir algo más? No, lo que se agregase arruinaría los momentos.

A veces pienso en lo bueno que sería congelar los instantes, las horas, todo.

Ahora con el tiempo analizo mejor, veo con mayor claridad. ¿Y que veo? Lo idiota que somos las mujeres en las cuestiones readicionadas con aquel órgano ubicado en la parte inferior del mediastino medio.

Si, somos tontas: nos creemos las palabras, amamos cuando ni si quiera ellos todavía piensan en eso (sacando raras excepciones, dudo de que alguna vez mediten sobre el amor: para ellos todo, absolutamente todo pasa por lo mismo ¿o me lo van a negar?).

Y después, como ilusas, esperamos hasta cansarnos, hasta pudrirnos como una manzana, creyendo en la estúpida ilusión de que todo volverá a hacer como antes: “ya nada es lo que era”.

Dije eso con bronca ¿no? Si pudiera leer estas palabras Juan Pedro. No se para que….pero tal vez, se sienta algo identificado: dudo….

Su frase célebre fue “no sos vos soy yo” (para, ¿eso no era una película de Peretti?). Y así como vino un día se esfumo casi sin despedirse. Yo seguí no me detuve a pensar demasiado. Creo que me hace mal pensar en gran cantidad ciertas cosas, y cuando lo realizo aquel mundo ficticio lleno de alegrías se me espanta en un suspiro.

Que se yo, todavía busco respuestas a lo que hice mal, igual lo entiendo, es sencillo: no me amaba. Aunque suene crudo, es tan real. En fin….

Otra vez, pasó lo mismo que con Manuel, la familia lo adoraba y éste era peor: mamá esperaba desde que yo entre en la adolescencia que salga con él. Encima si algo complicaba aún más las cuestiones es que era amigo de mis primos y hermanos, lo es (no se murió) y los padres amigos de mis queriditos primogénitos, por ende, lo tenía que seguir viendo, aunque me escapaba algunas veces con falsas mentiras aludiendo parciales cuando era invitada por mi primo a alguna fiesta allá en el campo: odiaba tener que hacer eso, por que yo amo el asado, el vino y una buena guitarra que suene de fondo con amigos cantando….Pero lo hice un tiempo (¿no notan que es idiota esto? Por que él seguía como si nada).

Hasta que un día festejando con la gente del hospital decidí en medio de una borrachera, que bien vienen a veces: ahí uno dice siempre la verdad, gritar en casi todo Plaza Serrano que el sábado como sea estaba en el campo de mi primo, que paradójicamente no se que festejaba con la mujer, creo que los dos años de casados.

Y así me vestí ultra diosa (por que si me ve, que vea que lo que se perdió) y llegue a Cañuelas, mi primo estaba feliz por mi visita, todos me halagaron lo flaca que estaba (¿estaría un mamut antes que no me di cuenta?), hasta que me tope con el señor, si con él: pobre (o no, ¡que pobre!) le tembló hasta el alma cuando me vio y peor aún, cuando me presento a Verónica.

Hola- Ella es Verónica, mi, mi….novia.

Hola. ¿Qué tal tanto tiempo?

Bien, yo bi-en

Verónica- ¿y vos quién sos?

¿Yo?, la prima de Guillermo y la ex novia de Juan Pedro. ¡Un gusto conocerte!

La cara de la tal Verónica (que la próxima la analizo como es físicamente y demás, ja) era inexplicable….

¿Vos bien nene?

Si…. (Estaba medio mudito ahora). ¿Y vos?

Regia… Pensaba venir con Manuel, ah por que volvimos, pero empezamos con las guardias y justo hoy le tocaba una: ¡una lástima!

Mañana estoy aquí. No te vas a perder como continuó esa noche y como es esa tal Verónica.....

No hay comentarios: